24 de octubre de 2007

Tiempo...sólo Tiempo.

La vida permite que sucedan hechos que en ocasiones no comprendemos, sin embargo en el transcurrir del tiempo aquellos hechos son justificados.
La vida constituye un equilibrio, es decir, lo que te quita hoy mañana lo devuelve, quizás no de la misma manera que quisiera uno, pero al fin y al cabo lo devuelve.
Me arrebataron de mi brazos al hombre que me despertó y me enseñó que si se puede volver a amar con las fuerzas e ilusiones de la primera vez y sufrí y algunas veces en la actualidad de mis días y noches ese dolor toca mi puerta y yo lo dejo entrar.
Me enamoré descontroladamente y perdí la razón, abrí de par en par todas las ventanas de mi vida para que se impregara mi alma de él, construímos una atmósfera de amor inigualable, sinceramente no puedo describir lo que constituyó que ambos nos amáramos. Pero bueno, la vida lo alejó de mi, más de lo que yo hubiese querido.
Hoy intento ordenar mi vida aunque la limpieza a tomado tiempo concretarla, no obstante he avanzado y sé que lograré vaciar completa mi vida de cosas que no me sirven. He puesto mi vida delante de Dios, confiando únicamente en lo que Él disponga para mi.
Deseo estar en paz, meditar en mis errores y enmendar para un nuevo camino.
Mis crisis continuarán, son inevitables soy de carne y hueso, pero confío en Dios que cesarán. El recuerdo de el permanecerá el tiempo que deba permanecer, lloraré las veces que tenga que llorar, arderá mi alma las veces que deba suceder, todo es tiempo.