7 de mayo de 2008

Tú, mi filosofía.

Fría pero emotiva está la noche, indican los palillos de aquel reloj que son ya pasada la tres de la madrugada...
Inquieta ella está en sus emociones, síntomas que despiertan en su interior,
sabe que se apronta la llegada de quién su corazón ama ferviente...
El reloj no se detiene en su alrededor, ante ella el tiempo no existe...
Se trastorna su dormir volviéndose sonambula, comienza a deambular entre sus cogniciones, sólo sabe de esperar...sólo sabe de un jueves, sólo espera un mañana...
Ella sonríe, saborea el sabor de sus besos, se impregna del aroma de las ropas que posee de él, se acrecienta cada instante más su emoción...anhela su llegada...se despoja de sus propias retenciones, todo este tiempo lo ha esperado sólo a él, sólo a él, únicamente a quién su corazón, su alma menciona cada noche, cada despertar, cada pensamiento, cada camino que ella anda....
La iris de sus pupilas destellan la dicha de su alma, ella ha vuelto a sonreír desde su alma, ella tiene a su lado al hombre que su juventud amó, al hombre que ella siempre ha amado, al hombre que ella ama.